Los glaciares argentinos continúan desprotegidos

10/09/10
Por María Inés Aiuto
El Extremo Sur

El controvertido tratamiento de la Ley de protección de los Glaciares y del ambiente periglacial, que debía realizarse en el Senado el miércoles 8, fue postergado por el titular del bloque oficialista, Miguel Ángel Pichetto, para el 30 de septiembre. La decisión se debió a que los gobernadores de las provincias mineras y petroleras solicitaron presentar su postura en la Comisión de Ambiente de la Cámara alta.

Los integrantes de la Comisión de Ambiente y Desarrollo Sustentable decidieron no firmar un dictamen que posibilitaba proceder a la votación en el recinto ya que los gobernadores Juan Manuel Urtubey –Salta-, Beder Herrera –La Rioja-, Eduardo Brizuela del Moral –Catamarca- , José Luís Rioja –San Juan-, Celso Jaque –Mendoza-, y Walter Barrionuevo –Jujuy-, pidieron ser escuchados en el Congreso.

Los senadores que integran la comisión de Ambiente, presidida por el kirchnerista Eduardo Torres -Misiones-, escucharon los testimonios de funcionarios y empresarios quienes cuestionaron la media sanción que dio el mes pasado la Cámara de Diputados por ser demasiado restrictiva para la actividad minera e hidrocarburífera.

“La norma peligra seriamente y este atraso no tiene otra razón que la presión de las provincias mineras sobre los senadores. La protección de los glaciares está siendo boicoteada por las empresas mineras y resulta lamentable que el Senado no haya mostrado ninguna convicción en materia ambiental. Las miles de llamadas y correos electrónicos que recibieron los senadores durante estos días, demuestran que la Ley de Glaciares es muy importante para los argentinos. Sin embargo, los legisladores priorizaron los beneficios de un sector por sobre el bien común”, expresó Hernán Giardini de la campaña de Clima de Greenpeace Argentina a EES. La ONG instaló en la Plaza de los Dos Congresos un bloque de hielo para acompañar su reclamo por la urgente sanción de la Ley de Glaciares.

Idas y vueltas de la ley

La ley de Presupuestos Mínimos para la protección de los Glaciares y del ambiente periglacial fue propuesta por la ex diputada Marta Maffei y aprobada por unanimidad por las dos cámaras del Congreso de la Nación en octubre de 2008. Al mes siguiente, la presidenta Cristina Kirchner la vetó por considerar excesiva la prohibición a la actividad minera y perforación petrolera en el área glaciar y periglacial.

Tras la veda, la Presidenta impulsó la presentación de un nuevo proyecto en el Senado, a través del senador Daniel Filmus, que obtuvo media sanción por unanimidad de ésta cámara en octubre de 2009. Más tarde, el diputado Miguel Bonasso, presidente de la Comisión de Recursos Naturales, reingresó al recinto la ley vetada –de Maffei- que fue aprobada por esa comisión y la de Minería –ambas de la cámara baja-, desechando la propuesta de Filmus.

Finalmente, Bonasso y Filmus lograron consensuar un proyecto en común que fue aprobado con media sanción en la Cámara baja –sin el apoyo oficialistas y algunos opositores- en agosto pasado. Cabe recordar que durante aquella sesión algunos legisladores cuestionaron a las provincias que sancionaron a fines de junio sus propias leyes de protección de glaciares favorables a la minería, entre ellas, La Rioja, San Juan, Salta, Santiago del Estero y Jujuy.

Ahora, los legisladores deberán escuchar la postura de los gobernadores y retomarán el tratamiento de la ley el jueves 30 de septiembre. Respecto a los resultados posibles, el ambientalista Giardini explicó que “existen cinco opciones, que salga la ley del acuerdo Bonasso-Filmus, que salga la Ley Filmus –aprobada en la Cámara Alta-, que se haga un mix de ambas intercambiando artículos, que se vote en contra o que se suspenda nuevamente”. El reglamento parlamentario establece que el proyecto de ley no puede abrirse ni se puede cambiar la redacción de los artículos, pero permite intercambiar artículos entre los dos proyectos.

Diferencias sustanciales entre ambos proyectos

En un detallado análisis realizado por Enrique Matías Viale, presidente de la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas, explicó las diferencias entre la propuesta del Senado y la de Diputados. Respecto al bien jurídico a proteger, uno de los temas más polémicos, Viale subrayó que mientras la primera “sólo protege dentro del ambiente periglacial a los glaciares de escombros”, la segunda “protege todo el ambiente periglacial, incluso los glaciares de escombros” y agregó que “en definitiva, el área que se deja sin protección –el proyecto del Senado- es la zona donde las megamineras pretenden operar estableciendo sus emprendimientos o utilizando sus recursos hídricos para los millones de litros diarios que necesitan en sus tareas extractivas”.

En este sentido, Javier Rodríguez Pardo, del Movimiento Antinuclear de Chubut, expresó en un informe que “en el proyecto de Filmus, primero se había eliminado el término periglacial y como la idea no prosperó debido a la oposición de las asambleas y comunidades afectadas por las explotaciones mineras, se lo incluyó pero sosteniendo que se entiende por periglacial a los glaciares de escombro”.

Viale también observó que con el proyecto de la Cámara alta, al disminuir el área a proteger, “se reducen las zonas donde van a regir las prohibiciones de la ley y el área de acción, estudio e intervención del Inventario Nacional de Glaciares”. Entre las restricciones, enumeradas en el artículo 6 de ambos proyectos, se mencionan la dispersión de sustancias contaminantes, la exploración y explotación minera e hidrocarburífera y la instalación de industrias y desarrollo de obras o actividades de este sector.

Respecto al artículo 17, incluido sólo en la propuesta de Diputados, el abogado explicó que es “la aplicación del Principio Precautorio de la Ley General del Ambiente (Nº 25.675) que obliga, en caso de ausencia de información -como ocurre en las áreas donde el inventario no ha sido realizado aún-, a actuar preventivamente cuando haya peligro de daño grave o irreversible por lo que en los lugares donde no esté terminado el inventario de Glaciares y ambiente Periglacial no podrán autorizarse nuevas actividades”.

Viale concluyó que la ley propuesta por el Senado “incorpora como Servicio Ambiental de los glaciares y del ambiente periglacial la reserva de recursos hídricos para las actividades industriales –es decir, las mineras podrán captar nieve de los glaciares y convertirla en agua si la autoridad de aplicación provincial considera que el glaciar no sufre impacto-, que no establece plazos determinados para la realización de las Auditorias Ambientales sobre los emprendimientos en ejecución, ni para la realización del Inventario Nacional de Glaciares en las zonas potencialmente intervenidas y consideradas prioritarias e incorpora a las autoridades provinciales en la confección del inventario –quienes podrían distorsionar la determinación de los cuerpos y las áreas protegidos y alcanzados por la norma-.”